Los profesores deben ser:
Capaces de generar un clima de confianza y respeto, propicio para el aprendizaje, saben escuchar a sus estudiantes y se adaptan a sus necesidades, confian en ellos y en sus capacidades.
Demostrar compromiso afectivo con los estudiantes, expresado a través de la cercanía y el apoyo incondicional en todo momento de su partcipación en esta institución educativa.
Tener una actitud positiva y amar su trabajo, sentir interés por la enseñanza y manejar una diversidad técnicas y estratégias para atender a la diversidad de participantes.
Tener capacidad de aprendizaje y adaptación, ser indagador, reflexivo, auto-crítico, de mentalidad abierta, flexibles y audaces. Capaces de trabajar colaborativamente.
Tener empatía y facilidad para comprender a las personas e identificar sus necesidades. Capacidad de comunicarse en forma asertiva y respetuosa.
Saben diseñar, organizar y poner en práctica estrategias y actividades didácticas, adecuadas a los grados y formas de desarrollo de los alumnos. Diseñan escenarios, procesos y experiencias de aprendizaje significativo y relevante.
Preparar a los estudiantes para que se adapten a la cultura vigente y, especialmente, prepararlos para el futuro.
Conocer y aplica distintas estrategias y formas de evaluación sobre el proceso educativo que le permiten valorar efectivamente el aprendizaje de los alumnos y la calidad de su desempeño docente.